DIA 5: Lunes, 2, Riverton- Te Anau


...a las 6 en pie, es tan de noche que no sabemos si la playa en la que hemos dormido es bonita o no; partimos tras equivocarnos un par de veces en la salida (en un pueblo que tiene tres salidas) rumbo a Te Anau, cuánto tarda en hacerse de día y que solitario está todo, es una sensación extraña y bonita a la vez, te sientes felizmente solo...

Tras un rato de conducción solitaria y cruzar un par de pueblos minúsculos llegamos a Manapouri: 9.35 am, hoy queremos ver los fiordos de Doubtful Sound pero no sabemos los horarios; tenemos suerte! el barco sale en 10 minutos. El viaje consiste en un barquito rápido por el lago Manapouri, un trayecto en autobús por una carretera serpenteante, aquí hace una parada donde se divisa el trazado del fiordo a lo lejos.

El autobús te deja en un pequeño embarcadero donde empieza el recorrido por el fiordo en un barco más grande. Hoy hace un día espectacular, parece mentira que a veces corten esta carretera por nieve. Lo que más nos gusta del fiordo es una parada que hace el barco y que está 5 minutos en silencio, incluso con los motores parados, es impresionante vivir el fiordo “real”. La excursión acaba con una visita a una central eléctrica que aprovecha la diferencia de altura entre el lago y el fiordo para crear energía.

Tras la visita llegamos casi de noche al puerto de Manaopuri, donde cogemos la autocaravana y nos dirigimos a Te Anau, vamos a nuestro segundo camping, el Top 10, para 2 días, está muy cuidado pero las parcelas son muy pequeñas y con el espacio muy demarcado, nada que ver con Akaroa. Nos vamos a por nuestra primera cervecita en The Moose, el pub del pueblo, a la salida 4 ºC!!; cenamos en la cocina del camping sin hacer amigos, la gente es algo rarilla.

Antes de ir a dormir volvemos a ver en la cámara las imágenes de Doubful Sound...




DIA 6: Martes 3, Te Anau - Milford Sound



Hoy dormimos un poco más, hasta las 8.30 no vienen a buscarnos para la excursión, vamos en minibús por el Mildford Track + crucero por el fiordo, hoy no queríamos coger la autocaravana por si en el camino había hielo o nieve. La excursión es muy entretenida, van haciendo paradas para ver paisajes mientras el conductor va contando historias relacionadas con la zona, eso sí, en un perfecto e imposible inglés para nosotros. De Te Anau a Milford Sound hay 120 km de una carretera increíble (ojo! que no hay gasolineras).

Una de las paradas es en el mirror lake (el nombre se lee en el reflejo del agua, el cartel es él simétrico), después hacemos un mini paseo con café y pastas al final con la gente del grupo; lo que nos gusta de esta excursión es que el grupo es de sólo 10 personas y se crea un ambientillo familiar, nuestro guía es un tipo simpático. El mejor paseo viene despues, 30 minutos por una especie de selva tropical completamente verde acabada en un río, el sendero sigue hasta un lago pero tenemos que volver al bus, empieza a llover, hoy el día es muy distinto al de ayer.
Llegamos a la moderna terminal de ferrys donde hay hasta cuatro compañias que hacen cruceros por el fiordo, todas valen lo mismo. Tenían razón, los fiordos son muy diferentes, éste es más salvaje y está lleno de cascadas, también por la lluvia. En el barco nos dan el lunch, una bandeja tipo avión. El barco para delante de la mayor cascada del viaje, es espectacular, entre la cascada y la lluvia y el viento acabamos empapados.




La vuelta en el minibús es para observar el paisaje de nuevo, esta vez sin paradas y sin comentarios, otra vez la sensación de ser minúsculo enfrente de la naturaleza.
Llegamos a Te Anau y vamos al supermercado, ya vamos controlando cuáles nos gustan más y empezamos a tener nuestras galletas y leche favorita, está bien esa sensación!. Después nos vamos al cine del pueblo donde vemos un documental grabado desde el aire de toda la zona de los fiordos. Las cascadas vistas desde arriba y cómo cae el agua son espectaculares, después nos enteramos que el cine lo construyó el director del documental para poder emitirlo de forma continua. La verdad es que el cine es muy coqueto.

Despues nos tomamos otra cervecita en el pub de ayer, Elisa ya ha hecho de la Export Gold su favorita pero yo prefiero ir probando cada día una nueva, están todas muy buenas. Nos vamos a la kitchen del camping, cenamos solos (spanish horario!!) podemos una lavadora y nos duchamos en unos baños con suelo radiante, perfecto!, este camping tiene unos servicios muy cuidados y modernos, no sé cuántos encontraremos así.

DIA 7: Miércoles 4, Te Anau - Queenstown


Madrugamos, hoy hace mucho frío, 0ºC, dicen que hacía días que no hacía tanto frío. Recogemos todo, llenamos el agua, vaciamos la grey water y nos vamos hacía el Kepler Track, al final decidimos no ir en taxi acuático sino hacer la ruta de ida y vuelta andando, las combinaciones para hacer trecking en estos parques son casi infinitas. Son las 9 y el sendero está animado aunque todo el mundo se dirige a Riverton. Nosotros vamos a ir hasta Brod Bay: 1h 20 min. ida y 5,6 km ida.
El sendero es perfecto, más de 1 m de ancho, bastante llano y muy cuidado, el paisaje selva tropical muy, muy verde (un pelín menos que el de ayer en la excursión), paramos en una playa de piedras en un mini descanso y en una de arena a almorzar el sándwich que nos regalaron ayer (rapiña tour) en el crucero. A la vuelta paramos en una playita cerca de la presa y con el solecito se está fantástico.
Vuelta a Te Anau, paseo, relax y barco a las luciérnagas, atravesamos el lago que bordea Te Anau, después caminito por dentro de la cueva viendo las cascadas y finalmente subimos a una barquita y a oscuras y en silencio vemos a las luciérnagas, impresiona la oscuridad total y lo que te acercas a los bichitos, pensábamos que iba a ser una cueva más grande y espectacular pero aun así es curioso.
Paseo por el pueblo, Internet para mandar noticias a España y tras 3 intentos nos tomamos un capuchino con un pastel en un restaurante mientras una pareja cena, aún no son las 5.

Carretera a Queenstown, hoy queremos dormir fuera de camping y por supuesto no vemos todos esos maravillosos lugares que vemos cuando no buscamos, aparcamos delante del lago, junto a un parque, no hay nadie aunque luego por el ir y venir de coches parece que esta zona es muy transitada por jóvenes parejas.

A menudo me sucede por las noches que cuando numero las fotos que hemos hecho, me doy cuenta en la pantallita de la cámara de la belleza de algunos sitios que ya hemos visto y que a veces olvidamos pronto porque esa misma tarde vuelves a ver otros parajes increíbles. Mirad lo que vimos por la mañana en el sencillito Kepler Track...





DIA 8: Jueves 5, Queenstown - Mount Cook Village


Nos levantamos a las 7, hoy hace un frío terrible, desayunar y hacer los bocadillos se convierte en una tortura para los dedos, se quedan congelados, nos damos cuenta que el aceite se ha congelado pero tampoco tenemos muy claro a que temperatura se congela... Hemos dormido delante del lago Wakatipu a 5 minutos del centro de Queenstown. A las 8:15 ya estamos en turismo, recorremos la calle principal del pueblo, 0º, viento y nos tomamos un café en Vudú, un sitio precioso con terracita, una mini guardería, mucho ambiente a esas horas de la mañana y con unos desayunos con muy buen aspecto. Nos encantan las cafeterias que vemos, tienen un encanto especial...y 100 tipos de muffins en cada sitio, Elisa es súper fan de los capuccinos y yo me he hecho fan de los long black, cafés super largos que para el frio que hacen van perfectos.
A las 9 abren el funicular, (funicular: visita obligada para Elisa) nos acercamos y subimos, damos un paseo por un caminito con restos de hielo de la noche y subimos a un telesilla, ahora hace menos frío y no hace viento; desde arriba hay unas vistas preciosas de la ciudad y del lago.

Nos vamos a Arrowtown, antiguo pueblo minero y de buscadores de oro, el pueblo es una única calle, muy cuidada, casi parece de película. Hay una galería de arte, la Craig Potton Gallery donde me enamoro de una foto preciosa, lástima de precio!.
En los lavabos públicos nos estrenamos usando el Dump y vaciando también el WC, ¿a que no sabéis a quien le ha tocado hacerlo? Hoy podemos volver a dormir a la aventura. Nuestro destino, la carretera camino de los lagos Tekapo y Pukaki, uno de ellos hemos leido que tiene el agua de color turquesa.

Paramos en un puente con un centro de información impresionante, qué bien se lo montan los neozelandeses!!, cuánto espacio para todo. Es un centro de bungy jumping, saltan desde un puente 43 metros y llegan al río, es impresionante sólo verlos, quién tuviera valor! Hacemos una pequeña parada en un pequeño pueblo minero, con su guía y sus atracciones, esta es la parte del país donde más atracciones turísticas de aventura hay, también hay una estación de esquí en los Remarkables Mounts, en este pueblo minero, la actividad consistía en recrear la búsqueda de oro...

Estoy algo cansado y por primera vez conduce Elisa, más que que el hecho de conducir por la izquierda, hay que acostumbrarse a las dimensiones de la autocaravana y a que es de cambio automático. Llegamos al fin al lago Tekapo, llegamos justo antes de atardecer, está bien pero... dudamos si merecía la pena venir hasta aquí, ya que había que dar algo de vuelta, nos pasa como comentaba antes, nos estamos acostumbrando a ver paisajes muy bonitos todos los días y al final no los valoras como merece. Rumbo a Mount Cook, vemos el lago Pukaki justo antes de anochecer, es un lago agrandado por una presa. Se nos hace la llegada a Mount Cook algo larga, es súper de noche, hay tan poca luz que cuesta ver las indicaciones, aparcamos en una calle sin salida y entramos en el mega bar del hotel-complejo por la puerta de atrás. Sorprendentemente en el bar hay bastante gente, tiene unas cristaleras enormes por las que se debe ver un paisaje impresionante, hay restaurante, tienda y una exposición con un avión de verdad y un museo dedicado a Sir Edmund Hillary, el primer hombre que llegó a la cima del Everest, se trata del Sir Edmund Hillary Alpine Centre. Tras una cervecita nos vamos a buscar la zona de acampada ya que aquí no hay camping. Pequeña aventura por 2 kms de camino de tierra, un par de vueltas y por fin la zona de acampada, hay que pagar y poner el dinero en un sobrecito y el recibo en la autocaravana que por la mañana se supone que el ranger lo controla. Estamos sorprendidos, hoy no hace frío, no hace falta hervir agua para calentar el ambiente. Qué ganas tengo de que se haga de día y ver dónde estamos! Qué curiosidad!



DIA 9: Viernes 6, Mount Cook Village - Wanaka


Hemos pasado una mala noche, hace mucho viento y la autocaravana se mueve mucho, nos hemos despertado por el ruido y sobre todo por el meneo de la autocaravana, asustados pensando si esto puede volcar.

Cuando nos despertamos vemos que hay muchas más autocaravanas que ayer en este free parking, estamos rodeados de montañas y a lo lejos se ve el mega edificio del hotel y el bar de ayer, y ayer de noche o se veía nada!

Nos vamos de excursión al Hooker Valley , hace muchísimo viento por ráfagas, que hacen que andar sea difícil y a veces están a punto de tirarte al suelo, cruzamos dos puentes colgantes, pasamos por una zona de descanso con baños y una caseta con un par de bancos y seguimos por un camino de madera que se parece al de las playas, no sabemos si es para preservar la vegetación o para hacer bonito, cada vez que hace viento va acompañado de agua que arrastra de algún sitio. Llegamos al lago Hooker, ,con el viento hay olas como si fuera el mar, tiene un color grisáceo, será por el fondo porque el agua viene directamente del glaciar, flotando hay mini icebergs al final del invierno debe ser impresionante el tamaño de los icebergs. El monte Cook está siempre rodeado de nubes. Hacemos el camino de vuelta acompañados por una chica inglesa. Después café y descanso en los sofás del hotel, con estas vistas cualquiera se va!, para darme el capuchino me dan un número con un pequeño altavoz, cuando suena ya puedo pasar a recogerlo.

Menos mal que en este pueblo hay gasolinera, nos vamos rumbo a Wanaka con paradas para ver las vistas del lago Tukapi y en Twitzel para usar la Dump Station.


Llegamos a Wanaka sobre las 4 y decidimos aprovechar la última hora y media de luz haciendo el sendero circular del Mount Iron , según la guía es 1 h 30’ y no habla de dureza. La vista desde el monte con el lago Wanaka y Hawea es preciosa pero la subida es dura, estamos desentrenados paras las pendientes, la bajada es a través de un bosque, llegamos a la autocaravana con el último rayito de luz.
Vuelta a la vida real y visita al supermercado en Wanaka, el cajero nos dice que mañana va a nevar sin embargo no hace frío, solo viento; paseo por la calle principal, cervecita en un bar (es cerveza local) y buscamos un sitio para dormir, en el parking delante del lago está prohibido, salimos del pueblo y a 5 km encontramos un parking al inicio de un sendero, sólo hay una señal de prohibido acampar, no dice nada de autocaravanas, nos quedamos aquí, veremos qué noche nos da el viento.




DIA 10: Sábado 7, Wanaka - Fox Glacier


El viento está noche ha sido terrible, soplaba diferente al de ayer, la autocaravana se movía con otros movimientos pero se movía muchísimo, decidimos que la próxima vez que haga viento dormiremos abajo. Nos despertamos y llueve mucho, no hay viento pero llueve, nos relajamos para levantarnos, nos damos cuenta que hay dos backpackers caravans más con nosotros. Nos vamos a Wanaka, turismo, paseo por la calle principal, Internet, compras y un café, llueve a ratos así que decidimos no hacer la excursión de la cascada e irnos hacía Haast.

Vamos haciendo paradas por el camino, para ver el lago Hawea, el lago Wanaka, para llenar de agua la autocaravana y más excursiones en el National Park Mount Aspiring (Aspirino para los amigos): Blue Pools, cascada y Haast Pass, está es durilla pero una vez arriba la vista merece la pena.
Decidimos acelerar para llegar a la playa de Haast con luz, nos ha dicho la mujer de la gasolinera que es preciosa, un día más comemos en ruta un bocata. Haast es un lugar despoblado, lo poco que vemos de la playa no es nada impresionante, recorremos los 48 kms hasta Jackson’s Bay para llegar a una agrupación de casas y un par de barcos desiertos, da hasta miedo... aunque es difícil no encontrar imágenes bonitas incluso en estos sitios...


Empieza a hacerse de noche. Carretera hasta Fox Glacier, increíble, en 140 kilómetros nos cruzamos con 4 coches, y son las 6 de la tarde, hoy decidimos dormir en camping.
Nos apetece cenar fuera, por primera vez en todo el viaje, más bien no nos apetece cocinar. En la única calle del pueblo vamos a un restaurante muy mono pero ya han cerrado la cocina (son las 7 de la tarde!!) y sólo hacen pizzas, no nos convencen y nos vamos al bar de al lado, hay bastante ambiente, están viendo un partido de rugby, nos tomamos una cerveza, tampoco podemos cenar aquí. El camarero nos cuenta que trabaja en una empresa de helicópteros, nos la recomienda y nos dice que intentará hacernos un pequeño descuento. Cuando parece que el bar va a cerrar (21,30h) nos vamos, cena, lavadora, ducha y nos acostamos tardísimo, son las 23.30h.




DIA 11: Domingo 8, Fox Glacier - Franz Josef Glacier


Esta noche ha hecho mucho frío, seguimos sin termómetro (a veces pensamos que es casi mejor) para saber la temperatura pero en las ventanas hay hielo. Nos cuesta un poco llenar de agua la autocaravana porque el agua de la manguera está helada.

A las 8.45 empezamos el sendero del lago Matheson, hace sol y un día despejadísimo, sólo una pequeña nube sobre el monte Tasman. El sendero no va pegadito al lago como pensábamos pero hay 3 miradores, la vista es espectacular, los Alpes del Sur con el Monte Cook y el Tasman presidiéndolo todo, el agua está un pelín movida y el reflejo no se ve nítido hasta que llegamos al último mirador y el reflejo es espectacular, la imagen es una de las Top 10 del viaje, Elisa va a estar recordando esta imagen los días siguientes...


El paseo de una hora es de los mejores del viaje, después vamos a un cercano lookout desde donde se divisa el Fox Glacier perfectamente.

A las 11 estamos en la oficina de vuelos, nos asusta un poco la de coches que hay en el parking, a ver si con este día tan bueno para volar que hace está todo a tope, pero no, en 10 minutos vamos a volar, al final nos atiende un colega de James y nos quedamos sin descuento, pero él nos lleva al helipuerto y nos explica “veeeery slooowly” las medidas de seguridad, el helicóptero es mucho más pequeño que el de NYC, somos cuatro pasajeros, nosotros vamos delante, pegaditos al piloto y la puertecita. Sobrevolamos la zona, es espectacular la cantidad de nieve que hay, las montañas, la formación del glaciar y lo cerca que está del mar. Aterrizamos en la nieve y parece increíble lo grande que es todo, es un pena que no apague el motor para oír el silencio como en Doubtful Sound, después vuelta por el glaciar con piruetas incluidas, el coste del helicóptero merece la pena.


Bajamos del helicóptero super emocionados, a mi me ha impresionado mucho más este vuelo que el urbano de Manhattan; nos vamos al pueblo y nos tomamos un cafecito y tarta en el pueblo y a aprovechar las horas de sol. Nos vamos hacia el Glaciar Fox, se llega hasta la lengua en apenas 20 minutos, es curioso ver hasta donde llegó el glaciar en su día, mientras te acercas hay carteles que dicen "hasta aquí llegaba la lengua en 1845..." Tratamos de ir a un viewpoint del glaciar, la carretera es demasiado estrecha para autocaravanas, intentamos ir andando pero a los 20 minutos nos rendimos y damos la vuelta y nos dirigimos por una carretera de curvas infinitas a Franz Josef.
Franz Josef Glaciar: este paseo hasta la lengua del glaciar es algo más largo que el Fox, también es más agreste, hay que ir por el curso del glaciar por un camino de piedras con un pequeño río para llegar, leemos que en los deshielos el río puede crecer varios metros de altura... en varios minutos. Vemos gente sobre el glaciar que hace rutas guiadas con material espefícico para ello, debe estar bien, pero no tenemos tiempo para hacer todo lo que este país propone. Tras ir y volver hasta la lengua hacemos un corto paseo a un pequeño lago donde se ve reflejado el glaciar, hay un banquito donde sentado puedes ver la vista...

Despues iniciamos una subida a una colina, se ve el mar subiendo y desde arriba el glaciar; creo que no merece la pena el esfuerzo para las vistas, aunque ya estamos tan cansados y el día ha sido tan intenso en emociones que igual no somos objetivos.

Se está acabando la luz y estamos rendidos, decidimos tomar una cervecita, cenar aquí y luego hacer camino hacía el norte. Nos tomamos la cerveza en el mismos restaurante que vamos a cenar, el Alice May, siguiendo la recomendación de Raquel de viatge addictes, aunque este año no tienen crema de mejillones de labios verdes en la carta, la comida está buenísima. Nos encontramos con las tres señoras que parece que nos persiguen desde ayer, nos las encontramos en todas partes, hablamos de lo visitado y lo que queda por visitar. Cuando acabamos de cenar son las 18:45h, el restaurante está bastante lleno.
Decidimos quedarnos en el camping, estamos muy cansados para seguir viaje y nos da miedo la acampada libre por si vuelve a hacer una noche heladora.

Elisa se va a dormir, sueña, lago Matheson, lago Matheson, lago Matheson...



DIA 12: Lunes 9, Franz Josef Glacier - Daniel´s Lake

Esta noche ha hecho menos frío, también ha contribuido la estufa que esta vez la hemos dejado encendida toda la noche pese al maldito ruido que hace; nos vamos prontito rumbo a Paparoa National Park.
Paramos en Greymouth a tomarnos un café, el pueblo es feo, gris y por supuesto pequeño, pero la cafetería como todas las del país está muy bien decorada, todo muy cuidado.
Al llegar al visitor center de Paparoa vemos que la marea alta es a las 15:27 h, la chica de turismo nos dice que los blowholes funcionan sobre 1 hora antes y hasta 1 hora después, eso si funcionan, pero que hoy con el día que hace: lluvia, viento hay posibilidades; no sabemos muy bien qué es eso de los blowholes pero decidimos esperar. Intentamos hacer una excursión por dentro de una cueva pero tras un par de golpes en la cabeza decidimos que la espeleología no es lo nuestro. Nos vamos al Truman Track a ver la gigante roca resbaladiza y la playita que hay al lado, está subiendo la marea y nos entretenemos viendo como las olas se comen la playa.


Llueve y estamos cansados así que en vez de hacer otra excursioncilla por la zona os quedamos leyendo tranquilamente en la autocaravana. A las 14,30h nos vamos a los pancakes, ya sólo las piedras formadas por perfectas láminas horizontales de roca impresionan pero cuando el mar enfurecido sale por los agujeros es espectacular, conforme más se acerca la hora de la marea alta más fuertes son las explosiones de agua, hay también una que es el sonido de una ola; acabamos empapados por el agua del mar; los pancakes y los blowholes pasan a ser uno de los Top10 de NZ, ni con fotos ni con palabras podremos explicar lo que hemos visto y la suerte que hemos tenido con la marea.

Aún así en este pequeño vídeo te puedes hacer la idea del efecto de los blowholes, aunque insisto, no hay nada como estar allí, el estruendo del mar, el silbido del agua subiendo por los huecos...


Acabamos empapados y una vez cambiados de ropa (una de las grandes ventajas de la autocaravana) y nos vamos dirección Tuaranga Bay, el parking es inmenso, no hay nadie, está prohibido dormir aquí, seguimos sin entender muy bien las reglas que siguen para permitir o no dormir a las autoautocaravanas en los sitios.
En el acantilado hay unas 50 focas, al principio es difícil verlas porque se confunden con las rocas y apenas se mueven, volvemos a estar en un zoo al aire libre. Ya es casi de noche y emprendemos carretera camino a Hanmer Spring, hoy hemos hecho muchos kilómetros, los últimos por interminables puertos de montaña y estamos bastante cansados, tras algunas dudas paramos a dormir en Spring Junction ya que queremos hacer el Lewis Pass de día, paramos en mitad de la nada en una zona de acampada que parece que está en obras. Cansados pero muy espectantes por lo que nos espera mañana...